Elul, último mes del año del calendario judío. Mes en el que empezamos a sentir la cercanía de todas las grandes fiestas que tienen lugar en el mes de Tishrei.
Son momentos para la inspección interior y el análisis de la propia vida.
Una búsqueda de la verdad que, en el judío, es un impulso tan poderoso e intrínseco, que aflora incluso cuando menos lo imaginamos.
Son días de reencuentro con la propia esencia de D-os.
Los 40 días que acontecen desde 1º de Elul hasta Yom Kipur (10º de Tishrei) han sido escogidos por nuestros sabios como un tiempo de reconciliación y un período de arrepentimiento y perdón.
El mes de Elul posee una energía particular, la cual permite desde el interior, y a partir de las propias fuerzas, simplemente nacer de nuevo.
Así de simple, comenzar de nuevo cuando se lo propone y cuando realmente se quiere.
La energía de Elul, nos permite desconectarnos del pasado, quitarlo de sobre nuestros hombros y nuestras espaldas.
Con esta filosofía de vida, todo lo indeseable que alguna vez estuvo apegado a nuestra vida, ya no tiene que ver con el que eres si no con el que fuiste.
Mas desde ahora, comienzas un camino nuevo, repleto de esperanza y creatividad.
La energía de Elul viene a ser pues, un despertar de la conciencia ante la proximidad del juicio de D-s , constituye un mes de misericordia divina , por eso en todo el mes se toca el Shofar para despertar del letargo e indiferencia y sumergirnos en el camino que nos conduce al renacer de una forma totalmente renovada.
RECOPILACION DE LAS LEYES PRACTICAS
Tenemos la obligación de prepararnos durante el mes de Elul, para el gran día del Juicio Divino, Rosh Ha Shana mediante un examen de conciencia diario con el fin de corregir nuestras faltas y adaptar nuestra conducta a las exigencias de la Torá. El estudio nos enseña la vía a seguir en lo que concierne a al adquisisciónde virtudes y la práctica de los mandamientos positivos y negativos. Multiplicamos nuestras oraciones para nuestra purificación. Así como las acciones de beneficencia, Tsedaká , que traen paralelamente una providencia de bondad hacia nosotros.
Elul es un mes de misericordia , Ra’hamin , y si mostramos una sincera disposición a integrarnos plenamente en el camino de la Torá, gozaremos de gran asistencia Divina que nos guiará en nuestra enmienda
El primer día de Tishré fue denominado por nuestra Torá como Yom Teruá (Día del Toque del Shofar) o Yom Zijrón Teruá (Día Recordatorio del Toque del Shofar) y por nuestros Sabios fue llamado como Rosh HaShaná (Cabeza del Año), Yom HaZikarón (Día del Recordatorio) y Yom HaDín (Día del Juicio).
En sus diferentes nombres encontramos el múltiple significado y la trascendencia de este día.
Día del toque del shofar.
"Y el día primero el mes séptimo sera de sagrada convocación, no haréis ninguna labor. Será el día del toque del shofar" (Num. 29:1).
El toque del shofar no es solamente el precepto Divino que caracteriza a este solemne día, sino que lleva consigo un gran significado espiritual, como explica Rabí Moshé ben Maimón (Maimónides):
"El mandamiento de hacer sonar el shofar en este día tiene un significado profundo: '¡Despertad de vuestro sueño durmientes… y meditad de vuestros actos! Recordad a vuestro Creador y retornad a Él en penitencia. No seáis de aquellos que pasan por alto las realidades en su búsqueda de sombras y pierden sus años en la persecución de cosas vanas que no pueden beneficiar ni liberar. Mirad bien por vuestras almas y considerad vuestros actos, abandone cada uno de vosotros los caminos erróneos y los pensamientos impropios y retornad al Eterno". (Leyes del Arrepentimiento 3:4).
El gran Rabí Saadia HaGaón, comentó que el shofar nos recuerda los siguientes diez aspectos:
1. Principio de la Creación y Día de la coronación del Rey, el shofar proclama la coronación del Todopoderoso como rey del Universo.
2. Pregón de retorno a la Buena senda, es decir, convocatoria para el arrepentimiento de los trasgresores.
3. Conmemoración de la Revelación en el Sinaí.
4. Recordación de las exhortaciones de los profetas a no abandonar nunca el bien y el Camino Divino.
5. Conmemoración de las destrucciones de los Templos y de las atrocidades de las guerras enemigas, recordando las causas que nos llevan a ello.
6. Evocación del sacrificio de Isaac, nos indica la firme disposición de Abraham y de Isaac, el primero a sacrificar lo más querido y el segundo a entregar su propia vida frente al llamado del deber.
7. El sonido del shofar provoca temor que nos mantendrá en constante estado de alerta.
8. Tener presente el Día del Gran Juicio y temerle, lo cual alerta la conciencia.
9. Profecía sobre la unión de las diásporas, que se llevará a cabo con un poderoso sonar de trompetas que anunciarán, al mismo tiempo la Redención de Israel.
10. Profecía sobre la Resurrección de los muertos y de la vida eternal que le aguarda a los justos.
Día del Juicio.
"El primero de Tishré, Rosh HaShaná", expresa la Mishná.
El concepto de la vida es contemplado por nuestros Sabios como un ciclo que finaliza en el mismo momento donde comienza. Es por eso que el primer día de Tishré se convierte en la finalización de un año y en la iniciación del entrante.
Como clausura de un ciclo, Rosh HaShaná, nos invita a la recapacitación, al exámen de conciencia, al Yom HaDín (Día del Juicio). La persona es responsable de sus actos, y por consiguiente, debe esperar el castigo o la recompensa por los mismos.
La libertad de elección nos impone la responsabilidad. Solamente el esclavo no está expuesto al castigo, pues no es libre en su comportamiento.
Tras el Juicio, viene la esperanza en la Bondad Divina, como dice el Midrash Rabbá (Vaik. 29:5): "Tocad trompeta en el novilunio". En este mes rectificaréis vuestras acciones. El Consagrado, Bendito sea, dijo: 'Si mejoráis vuestros actos, Yo seré como una trompeta (Shofar) para vosotros. Así como el Shofar aspira (aliento) por un extremo y expele por el otro, así Me levantaré Yo del Trono del Juicio y Me sentaré en el Trono de la Misericordia... en el séptimo mes".
Día del Recordatorio.
Entramos en el nuevo año asumiendo nuestra responsabilidad, con la esperanza de que el pasado nos haya servido como enseñanza para el futuro, a diferencia del concepto pagano, en el que el año nuevo se convierte en una oportunidad para el exceso, el abuso, el júbilo, y hasta para la promiscuidad.
LEYES DE ROSH HASHANA
BENDICIONES DE ROSH HASHANA
COSTUMBRES DE ROSH HASHANA
MENSAJE DEL RABINO DANIEL GOLDMAN A LA COMUNIDAD BET-EL DE BUENOS AIRES
Elul 5767 Agosto 2007
Queridos amigos:
Mes de Elul, mes de la memoria, del retorno, repaso y reparación. Es a través del balance del alma, que superando la alienación cotidiana, nos remitimos a colocarnos en nuestra frágil dimensión humana luego de haber pasado un año calendario, cuyas huellas consagran valores y acciones que imprimen vigor para continuar trazando nuestro destino con significado y belleza.
Ante la magnitud de los Días Reverenciales, en los que de manera devota cada uno de nosotros reafirma su compromiso con la vida, quiero de modo sincero acompañarme en el recuento que imprime nuestra tradición, y que supera cualquier categoría simbólica de un debe y un haber.
Una común y secreta cadena nos une en la experimental indagación que hace a nuestra identidad. Motivos lógicos, ideológicos, razones del alma, búsqueda intelectual, anhelos y recuerdos, consideraciones ocultas y explícitas hacen que nuestra pertenencia, difusa o no, se plasme en la construcción de este camino congregacional. Bet El es mi comunidad y la de todos ustedes. Bet Am, casa de tantos, de todos. Lugar en el que hasta Dios tiene cabida. Y en ella, la bella vorágine que santifica lo cotidiano incluye niños que aprenden y maestros que desarrollan su vocación en la escuela, adultos que ahondan en el vínculo con el estudio de la palabra y jóvenes que se descubren en su propio crecimiento. Llanto que ayuda a cicatrizar heridas en la letra del Kadish, y copas quebradas en el regocijo de un casamiento. Majané Ramah, nuestro compromiso con Israel, la ayuda solidaria a través de Hineni, Shorashim que acompaña la edad de la sabiduría. Y mucho más. Es ese más, el buen sentido de acciones que no precisan ser nombradas porque toda definición limita. Y aquí en Bet El, el límite lo marca tu voluntad. De recibir y brindar.
Mi cálido agradecimiento a la rabina Silvina Chemen, que rápidamente se hizo querer por nosotros y quien con empuje viabiliza sueños y aspiraciones. Del mismo modo, el merecido reconocimiento al Consejo Directivo que, en vínculo de tensión creativa permite con energía llevar a cabo la noble labor de acompañar y en algunos casos liderar proyectos que plasman los capaces profesionales de todas las áreas, quienes se entregan con pasión a la tarea.
En Bet El estamos en un buen momento. Espero que con altura espiritual sepamos habitar y disfrutar de nuestra casa.
En el quehacer de la comunidad judía local, la falta de esclarecimiento ante los atentados a la Embajada y a la AMIA, nos duele, y como argentinos judíos el dolor no paraliza nuestro reclamo de justicia, ni la lucha por la búsqueda de los responsables intelectuales y de facto.
En otro orden, más allá de la colaboración formal entre las instituciones, se suscitó un conflicto no menor en relación al tema de los cementerios pertenecientes a la AMIA. Con el propósito de querer dar una respuesta a los entierros de nuestros hermanos que por convicción abrazaron el judaísmo por opción, en el seno de la comisión directiva de dicha institución se presentó un documento que, considerando dar solución al conflicto, derivó en la situación opuesta, tanto por el carácter del mismo como por la terminología utilizada. Sin intención, resultó una situación lacerante y contraria al espíritu pluralista que debiera primar en los vínculos comunitarios. Muchos sectores, entre los que me encuentro, abogamos por modificaciones dignas, inspirados en un hondo mensaje abarcativo e inclusivo, y cuidando la delicadeza y sacralidad que demanda el tema, para que no se produzcan rupturas en el ámbito comunitario amplio. Pero por otro lado, también estas circunstancias deben verse como una oportunidad única para generar la discusión que se ha olvidado, la polémica necesaria, el intercambio creativo y por sobre todas las cosas, la múltiple convivencia, dada la variedad de interpretaciones, dimensiones, significados y cambios de paradigma en nuestra rica tradición. En este sentido, confío en que la dirigencia comunitaria, muchos de los cuales gozan de mi amistad y estima, sepa revisar los actos previos y acompañe con sensibilidad las decisiones que, más allá de la coyuntura, signan la historia. Espero que en el corto plazo, con voluntad integradora, todo esto pueda ser resuelto positivamente.
La Argentina se prepara para continuar con elecciones, entendiendo la misma como parte del sagrado juego de la democracia. Bet El, como Comunidad de Fe y Pertenencia, no es un espacio cuyo liderazgo “baje línea”, ni tampoco alienta la seducción a ningún supuesto electorado judío. Apelamos a seguir votando con convicción, a valorar el mensaje de libertad, de trabajo solidario, de respeto, de equidad económica y social, de lucha contra la discriminació n y de defensa de los derechos humanos, tema en el que desde lo personal me veo intensamente involucrado.
Israel sigue siendo el lugar de anhelo al que cada judío debe aspirar para su realización plena. Visité, o mejor dicho retorné hace pocos meses atrás, con un querido grupo de congregantes, y volví a percibir que más allá de los conflictos, es una sociedad cuya creatividad, sus manifestaciones culturales y científicas, su espiritualidad resulta motivo de orgullo para cada judío. Estando allá, desde mi alma redescubro en esa tierra una conexión que adquiere un carácter de plenitud mística. El compromiso para que la paz con nuestros vecinos palestinos pueda llegar y convertirse en duradera, refleja una de mis más firmes convicciones y deseos.
Los fundamentalismos bajo formatos religiosos y/o amparados en aparatos gubernamentales hacen que los conflictos de coexistencia e intolerancia se agudicen cada vez más. El mundo sufre una debacle moral sumamente peligrosa. El negacionismo histórico se manifiesta de manera endémica, propugnando la violencia que comienza con la distorsión de los hechos que son cosa juzgada. Es por ello que estoy convencido en la apuesta al diálogo interreligioso, ejercicio que sin perder la particularidad intenta sortear los prejuicios que tienen su raíz en la falta de conocimiento del otro. El diálogo es el lugar donde cada cultura y tradición puede brindar el aporte específico para enriquecernos todos, dado el modo singular con que cada uno de nosotros se aproxima a lo trascendente.
Un año nuevo se acerca. Algunas sillas alrededor de nuestras mesas festivas estarán vacías, pero otras serán ocupadas por seres llamados a la nueva existencia. Lo mismo ocurrirá en nuestra sinagoga.
Los espero para que Bet El, una vez más, pueda verse colmada con la plegaria comprometida para mantener lo necesario, modificar lo que se debe y elevarnos en un tiempo pleno de desafíos y de esperanza.
Con amor
Dany Goldman
FUENTE Bet El Buenos Aires
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